El ingreso al Palacio de Hacienda fue copado este mediodía por decenas de intendentes liderados por los ministros bonaerenses de Infraestructura Gabriel Katopodis y de Gobierno Carlos Bianco, que se presentaron ante las oficinas del titular de Economía de la Nación Luis “Toto” Caputo para reclamar por la continuación de la obra pública y el pago de una deuda de casi $6 billones que el Estado argentino mantiene con la Provincia. El evento, en la práctica no más que la presentación de una nota formal, quedó imbuido de una alta simbología política en una semana clave para la gestión de Javier Milei.

Mientras la Casa Rosada cuenta las horas y los votos de cara a la anticipada discusión de la “Ley Bases” oficialista en el Senado este miércoles, la gobernación que comanda Axel Kicillof desembarcó este martes en la puerta del ministerio más importante del país con una inmensa tropa compuesta por funcionarios bonaerenses y un total de 60 jefes comunales peronistas en un evidente acto de rebeldía interdistrital: “No vamos a negociar los derechos de nuestra gente. Al pueblo no lo pueden frenar”.

Con un lema en contra de la “Ley Ómnibus” y levantando la bandera del reclamo por los $5,8 billones que la Nación le debe a la Provincia, Katopodis y Bianco encabezaron la movida que tuvo como objetivo concretar la entrega de una nota formal a Caputo con los detalles del pedido de Kicillof. La solicitud había sido rubricada por la mañana en la Casa de la Provincia: tras firmar el petitorio, los dirigentes se encaminaron hacia el Palacio de Hacienda, donde consumaron la presentación y se tomaron una sugestiva foto de alto voltaje político.

En Buenos Aires, casi 1.000 proyectos de obra pública permanecen paralizados debido al desfinanciamiento instrumentado por la “motosierra” mileísta desde Nación. A las erogaciones congeladas se les suma también más de un billón de pesos de deudas directas del Estado argentino con su par local. Para las autoridades de la Provincia, el Gobierno “le está quitando oportunidades de desarrollo a estas ciudades dejando hospitales, rutas, universidades, acueductos, pasos bajo nivel y rutas frenadas”.

Mientras tanto, le sigue cobrando impuestos a los bonaerenses. En la Provincia, con Kicillof a la cabeza, vamos a plantarnos, a dar testimonio y a cuidar a los laburantes, a las PyMEs, a los jóvenes y a los jubilados”, expresó Katopodis al término del acto. Bianco, por su parte, advirtió que el ministerio de Economía de la Nación aún no da respuesta: “Hace un mes y medio aproximadamente enviamos formalmente el reclamo financiero. Estamos obligados a apersonarnos para defender los intereses de Buenos Aires”.

Posteriormente, Kicillof condujo un acto oficial donde disparó con filosos dardos a la gestión de Milei. Junto a él se mostró la vicegobernadora Verónica Magario, que expresó su “preocupación” por el recorte de fondos “que afecta a los habitantes de los 135 municipios en un contexto de plena recesión”. Así, sostuvo: “Hemos recurrido a la Justicia, hemos recurrido a permanentes pedidos de reuniones, y hoy hemos llevado este petitorio. Realmente necesitamos una respuesta”.

Y concluyó: “Vamos a defender la educación, la salud, las obras, el salario, el trabajo, nuestras PyMEs, nuestra producción, a nuestros abuelos y el desarrollo de la vida de los niños, los jóvenes y los adolescentes. Este presidente se jacta de haber bajado la inflación, ¿y a qué costo? Al costo de que no haya trabajo, de perder salario, de tener una recesión terrible que ya hemos vivido en la Argentina y que sabemos que termina en un desastre”.