La maximidad en manos de Vidal
Columna de opinión por Adrián Salonia
Los primeros máximos conocidos en la historia fueron inventores, grandes guerreros y algunos de los mejores gobernantes. Es difícil ser máximo pero es posible.
En el mundo occidental están ocurriendo sucesos originales. En Galicia, España, Podemos , una fuerza de izquierda reciente superó el socialismo; en Alemania una fuerza ultraderecha le ganó a Ángela Merkel en su distrito; Estados Unidos está consternado por la aparición de un fenómeno populista encarnado por Donald Trump; una movilización continua se llevó puesto al Partido de los Trabajadores en Brasil; y en Colombia frente a todos los pronósticos, el NO a los acuerdos de paz gestionados por Juan Manuel Santos le ganó al SI.
Argentina también forma parte de esa aldea de sucesos originales María Eugenia Vidal le ganó al aparato peronista en la Provincia de Buenos Aires, símbolo de los sectores populares. La dirigente del PRO fue respaldada por la clase obrera, no toda, pero sí una mayoría que decidió votarla porque creyó que llegaba con otros fines, con una nueva forma de hacer política.
Hoy a más de diez meses de su mandato queda demostrado que decidió no pactar con el pasado, decidió no pactar con las mafias que durante décadas tanto daño hicieron a los bonaerenses. La gobernadora pasa la mitad de sus días en su despacho y la otra mitad en la calle, entiende que ponerle cuerpo a la gestión es vital para comprender los problemas de la gente en una provincia que es un país en sí mismo.
Fue elogiada dos veces por el Papa Francisco y supo sentarse a dialogar con intendentes que no son de su partido, tiene buena relación con los movimientos sociales a los que recibe con asiduidad, y se preocupa para que el Estado esté presente. Mira hacia diciembre, un mes sensible que recuerda uno de los momentos más tristes de nuestra historia reciente con la complejidad de los hechos ocurridos. La Gobernadora se propone también modificar la estructura de las fuerzas de seguridad incluido el servicio penitenciario, abandonado y minado de corrupción.
Todos los aspectos señalados la convierten en la mujer más valorada de la dirigencia argentina, por eso es momento de preguntarnos ¿Tiene futuro político Vidal aunque a Macri no le vaya bien?