El Intendente de Carlos Tejedor, Raúl Sala, no dudó en sacar el guardapolvo blanco, el estetoscopio y todos los elementos necesarios para asistir a los vecinos de Timote que quedaron abnegados tras el temporal que azotó al municipio.

Por las mañanas se desempeña como Intendente, desarrollando todas las tareas burocráticas, administrativas y de gestión y, pasadas las 15, abandona el traje y la corbata para ayudar, como doctor, a las víctimas de las inundaciones.

Raúl Sala explicó que la localidad en la que nació, "Timote tenía un solo médico de 48 horas, no había uno estable y para relevarlo me auto-convoqué y viajé". En ese sentido, por "la mañana estaba en la municipalidad y a la tarde viajaba a Timote, ejercía de médico, me quedaba a dormir allí y a la mañana volvía a la municipalidad a trabajar".

Finalmente, remarcó que "pasé más de una inundación junto a los vecinos de Timote, no los iba a abandonar en esta situación" y Sala concluyó "mi prioridad es mi compromiso con la gente y con la vocación con que nací".