Tras la reunión de Javier Milei con Kristalina Georgieva, el Fondo Monetario Internacional aseguró que el Gobierno argentino se comprometió a acelerar la devaluación y levantar el cepo. Sin embargo, el ministro Luis Caputo y el vocero presidencial Manuel Adorni negaron cambios y desestimaron las proyecciones del organismo que pidió un ajuste fical de “mayor calidad”. 

“Tras las medidas iniciales para deshacer las restricciones y controles cambiarios, las autoridades siguen comprometidas a deshacer todos los controles de capital y restricciones cambiarias, comenzando con las medidas más distorsivas, incluida la eliminación del esquema de exportación preferencial 80:20 y eliminar el impuesto PAIS antes de finales de 2024”, sostuvo el equipo técnico del Fondo Monetario.

De esta manera, el FMI aseguró que el Gobierno iba a terminar con el dólar blend a finales de junio pero, inmediatamente, el equipo económico descartó cualquier cambio en el esquema del dólar exportador.

“Si bien la tasa fija de crawl (2% mensual) ha ayudado a anclar la inflación luego de la gran devaluación, las autoridades ajustarán la política cambiaria con el tiempo para moverse de manera más flexible para reflejar mejor los fundamentos y salvaguardar una mayor mejora en la cobertura de reservas”, señalaron los técnicos del Fondo. 

Acto seguido, el informe del organismo puso en duda la sostenibilidad del superávit dado que indicaron que de los 2,9% del PBI de ajuste fiscal acumulado al primer cuatrimestre, 1,1 puntos son explicados por el impuesto PAIS que el Gobierno promete eliminar. 

De todas formas, el propio Caputo señaló de cara a la opinión pública que no habría una devaluación y que tampoco se tocaría el esquema de 2% de devaluación mensual del tipo de cambio oficial y que el dólar exportador continuaría vigente. 

Este martes, Manuel Adorni salió a respaldar la postura del Palacio de Hacienda y sostuvo que “las estimaciones del Fondo Monetario como cualquier organismo internacional, no nos corresponden, no las hacemos nosotros" aunque remarcó que "por su puesto que las respetamos”.