“Habla con todos para consolidar la cohesión de UP, después la realidad dirá”
En el Frente Renovador ponen paños fríos a las tensiones de las últimas semanas y hablan de un Massa dedicado a “acercar posiciones”. Libro con título y tapa en clave patriótica en su última etapa editorial y sin una presentación definida aún. Mantener el perfil propio y cuidar el paraguas UP.
El peronismo atraviesa una etapa de recomposición tras el duro golpe electoral recibido a manos de Javier Milei el año pasado, y el proceso no está exento de tensiones y diferencias. Las distintas interpretaciones sobre los motivos que llevaron al fracaso del gobierno y la derrota en las urnas se cruzan con lecturas y estrategias disímiles sobre cómo pararse frente al nuevo tiempo político que se abrió en el país. Pero en esos tironeos hay un activo al que nadie le baja el precio y todos ponen por encima de las diferencias: la unidad.
En ese marco, cada sector mueve sus fichas y busca su lugar en el nuevo equilibrio, y desde lo que fue la tercera pata del Frente de Todos empiezan a dar señales de vida, tras lo que fueron semanas marcadas por las tensiones entre La Cámpora y Axel Kicillof. “Sergio dijo en campaña ´no nos sobra nadie´, así como dijo ´no nos entra un quilombo más´, cuando las diferencias proliferaban y él marcó la cancha del momento. Ahora también dice ´es con todos´, ese es su rol en este momento”, dicen en el Frente Renovador, el partido del ex candidato presidencial de UP, que supo aglutinar tras su figura a y mantener arriba del ring a un peronismo que a mediados de 2022 parecía al borde del nocaut.
Massa guardó un cauteloso silencio durante estos 6 meses de gobierno de La Libertad Avanza, y en su entorno explican esa actitud como un gesto de “respeto de la elección de las mayorías” y por “dejar gobernar a quien fue elegido”. Sin embargo, el líder del FR se mantiene activo por lo bajo en lo que considera como su principal posibilidad de aporte en este momento, que es sostener la unidad del peronismo.
No es tarea fácil. Episodios recientes recalentaron los puentes entre la tropa massista y la de otra de las figuras rutilantes de la actualidad del peronismo, el gobernador Axel Kicillof. En el municipio bonaerense de Roque Pérez, gobernado por el intendente renovador Maximiliano Sciani, el bloque de concejales PJ Axel Kicillof generó las condiciones para que el oficialismo perdiera la presidencia del Consejo Deliberante a manos de la oposición. Otro capítulo en la misma línea fue el acto organizado por el jefe comunal kicillofista Jorge Ferraresi en un territorio massista como el distrito de San Fernando, que cayó mal en las filas del intendente Juan Andreotti. En paralelo a esto, Massa conserva una muy buena sintonía con Máximo Kirchner, abiertamente enfrentado al gobernador.
Sin embargo, en el Frente Renovador le bajan la espuma a esos eventos y los encapsulan como hechos aislados y frutos de dinámicas locales y particulares. “Sergio con Axel habla cotidianamente, no hay ninguna tensión. Puede haber episodios que tengan que ver con tiempos de la gestión, administrativos o dinámicas locales, pero en lo político el diálogo con todas las partes de UP está vigente y es saludable”, describen.
Massa mantiene comunicación “cada vez que hace falta” no solo con Kicillof, sino también con Máximo Kirchner y CFK. “Habla con todos para consolidar la cohesión de UP, después la realidad dirá”, explican en su entorno, reforzando su “experiencia, capacidad y voluntad para el diálogo” como su principal activo, y despegándose de cualquier especulación en torno a candidaturas o de tinte electoral. Para eso, dicen, falta mucho y habrá que esperar a los primeros meses del año que viene.
Por lo pronto, el tigrense se concentra en mantener unido al peronismo y desde su partido resaltan que ese mismo rol es el que supo jugar durante los años del Frente de Todos. “Cuando había problemas internos él decía ´muchachos tranquilos y sigamos´, y cuando empezaron a sonar las aspas del helicóptero, el tipo dijo ´paremos la mano porque esto no va a terminar bien, déjenme a mí, yo agarro esta papa caliente y voy´. Una situación que parecía que se venía a pique y él la sostuvo, puso el barco otra vez en orden y lo llevó a puerto. Esa es la mejor herramienta que puede aportar, la experiencia y el cuero duro para aguantar las difíciles”, señalan en las filas del ex ministro candidato.
Hoy por hoy, el Frente Renovador se encuentra en un proceso de emergencia de nuevas caras y referentes, cuadros técnicos que buscan posicionarse desde sus experiencias de gestión y su formación en temáticas específicas. “Es algo que ha distinguido siempre al FR”, destacan desde el partido, y resalta a jugadores como Agustín Gerez, el ex presidente de Enarsa a quien se vio muy activo durante la reciente crisis del gas, o al nuevo presidente partidario, Diego Giuliano. En el massismo reafirman como un valor la construcción de nuevas referencias ligadas a sectores técnicos específicos, que sostienen un perfil propio como partido del cual no tienen intención de moverse. Es más, lo consideran un activo indispensable para la totalidad de UP, un pilar fundamental para la construcción del peronismo que viene.
Con sus nuevos lugartenientes saliendo a jugar a la cancha de la política, Massa dedicó estos meses a un reacomodo de su posición personal y a la hechura de un libro que está cada vez más cerca de ver la luz. Aunque en el FR no terminan de confirmarlo, el libro se llamaría “Querer un país”, y tendrá una tapa marcada por colores y simbología patriótica.
En sus páginas podrán leerse las vicisitudes del año y medio de Massa al frente del Ministerio de Economía, y cerca del ex ministro candidato no niegan que algunas anécdotas puedan estar cargadas de picante. Detalles intimistas, pormenores de los diálogos que tuvo que mantener con muchos sectores como el FMI y la política en general, se prometen cerca del tigrense como parte del menú que los lectores podrán encontrar en sus páginas. El libro se encuentra en su fase final de producción editorial, pero aún no se definió una fecha ni una modalidad de lanzamiento. La presentación podrá ser desde un acto en un teatro o un espacio público con un formato más tradicional, hasta un streaming.
Mientras tanto, Massa articula con los principales sectores de UP pensando en que el peronismo pueda llegar a ser una opción electoral competitiva en el 2025. En ese sentido, en el FR recuerdan que su referente se expresó más de una vez en cuanto a “lavar los trapitos sucios adentro” como forma de tramitar las internas. Hoy por hoy, y frente a las diferencias expuestas a cielo abierto entre La Cámpora y el kicillofismo, opinan tanto que “hay momentos en lo que hay que plantear y discutir ciertas cosas si eso va a llevar hacia adelante a todos juntos”, así como también que “habría que ver si es el momento para postular personas como candidatos para una carrera que se va a correr el año que viene”. Mensajes para ambos campamentos.
En el FR sintetizan su posición expresando que “ahora que hay tantos dimes y diretes y vuelan algunas piedras para algunos lados, Sergio lo que hace es acercar, escuchar a uno, escuchar al otro y tratar de aunar acuerdos con las partes. Ese es su rol, su experiencia, su voluntad y capacidad de diálogo”.
Líder de la campaña y el esfuerzo electoral que llevó a UP hasta el balotaje y cosechó el 44% de los votos en esa segunda vuelta, Massa no se apura ni se desespera por su vuelta al centro de la escena. El rol de componedor y articulador entre posiciones, que tanto rédito le dio durante la experiencia del FdT/UP, es hoy nuevamente su mayor activo. En el FR lo resaltan ante la consulta sobre si se arrepiente de haberle puesto la cara y el cuerpo a una elección que parecía perdida de antemano: “Lo hizo convencido de que era él quien tenía que hacerlo, le salió naturalmente. Fijate cómo alguien que llega como tercera pata a un gobierno nuevo termina siendo todo lo que representó Sergio, la persona que agarró el timón de un barco que se hundía y lo llevó a puerto”. No habrá que descartar que, más temprano o más tarde, quien supo ser capitán quiera poner sus manos nuevamente sobre el timón.