Bullrich activa nuevamente el protocolo antipiquetes para la marcha de la CGT
A partir de las 12 del mediodía de este jueves comienza el plan de lucha de la Confederación General de Trabajo. La central obrera llama a movilizar al Congreso, junto a los jubilados. Las fuerzas federales ya se despliegan alrededor del Congreso, pero la Policía de la Ciudad será la encargada del control en las calles
Como parte de un plan de lucha de 36 horas, en la previa al paro general, la CGT convocó a una gran movilización al Congreso a partir de las 15 horas, que acompañará la habitual marcha de los jubilados. Como es costumbre también, el Gobierno ya comenzó a desplegar fuerzas federales alrededor del Congreso y planea la activación del protocolo antipiquetes.
En los alrededores del Palacio legislativo ya hay un vallado perimetral. A un costado, se ubicarán las Fuerzas Federales (Policía Federal, Gendarmería Nacional, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria) mientras que la Policía de la Ciudad se ocupará de la seguridad y control de las calles.
Sin embargo, el principal operativo de seguridad estará a cargo de las fuerzas federales. Es que la presentación que hizo el juez porteño Roberto Andrés Gallardo para pedir que se desplazara al Ministerio de Seguridad de la Nación del operativo, la solicitud no prosperó.
Bullrich entonces activó su protocolo antipiquetes, una vez más, a la espera de la movilización. Se espera que la marcha sea masiva porque, además de los jubilados y los gremios de la CGT, también participarán los sindicatos que integran las dos vertientes de la CTA, partidos de izquierda, movimientos sociales y organismos de derechos humanos.
A las 17 horas se realizará el acto central en contra del ajuste de Javier Milei. Desde allí, se acompañará el reclamo semanal de la mesa coordinadora de jubilados, que exige un aumento de emergencia para los haberes, la restitución del 100% de descuento en medicamentos de PAMI y la prórroga de la moratoria previsional.
De todas maneras, no está previsto que los dirigentes sindicales suban al escenario -al menos hasta ahora-.