El “renunciamiento clase B” de Macri visto desde el Frente de Todos

En la mañana del domingo se conoció el segundo gran cimbronazo del escenario pre electoral para este 2023. El primero, matizado por el persistente operativo clamor por su candidatura, fue el anuncio de CFK de que no integraría ninguna boleta a partir del intento de proscripción que denunció luego de la sentencia en primera instancia en su contra por la causa vialidad. Meses después y siempre espejando de alguna manera las jugadas de la Vicepresidenta, llegó una especie de “renunciamiento clase B” por parte del otro gran liderazgo de los que ordenan hoy la política nacional: el del ex presidente, Mauricio Macri. ¿Cómo cambia el panorama para el oficialismo esta situación?

Diagonales tanteó a distintos sectores del FdT en relación a cómo ven el reordenamiento del escenario, al cual el anuncio de Macri le incorpora algunas preguntas ineludibles: con el ex presidente fuera de la contienda electoral, ¿bajan las probabilidades de que CFK revea su posición y sea candidata? Y en relación a eso, ¿continuará a toda máquina el operativo clamor o se reorientará la estrategia del cristinismo hacia la consolidación de otro candidato? ¿Quiénes juegan y hasta dónde en esa carrera? ¿Puede haber un salto de Kicillof a la nación? En la otra orilla frentetodista, la definición de Macri ¿apura una definición de Alberto Fernández? ¿Y qué pasa con Sergio Massa? ¿Se modifica su situación con Macri “out” o sigue dependiendo exclusivamente de sus resultados económicos?

RENUNCIAMIENTO CLASE B

Lejos de las posibilidades del análisis que podría hacer un psicoanalista sobre la fijación de Macri con CFK, no puede dejar de mencionarse el permanente movimiento en espejo y desde atrás que el ex presidente mostró en más de una ocasión respecto a las jugadas de la Vicepresidenta. Basta recordar el manotazo de ahogado de Macri yendo a buscar a Miguel Pichetto para que fuera su candidato a vice en 2019,  totalmente descolocado por la fórmula Fernández/Fernández que decidió CFK. Un intento de responder con sorpresa a la estrategia de la sorpresa de CFK, que no le reportó resultado alguno al líder del PRO. Hoy, tras el nuevo sacudón que significó para todo el mapa político el “no voy a ser candidata a nada, termino el 10 de diciembre y me vuelvo a mi casa” de CFK el 6 de diciembre pasado, en lo que fuera su descargo tras la condena en su contra dictada por el TOF 2, Macri volvió a intentar ponerse en un mismo escalón que la líder del kirchnerismo, con resultados diferentes dependiendo del lado de la grieta en que se mire.

Mientras que en la vereda amarilla festejaron el gesto como un “acto de grandeza”, lectura que el propio Macri intentó consolidar en entrevistas posteriores a su video afirmando que le había costado bajarse “si sabía que ganaba”, que sentía que “merecía una revancha” y que estaba feliz porque sentía que le había “ganado una batalla al ego” con su decisión, en el FdT relativizaron totalmente esa mirada. Para el oficialismo está muy claro que Macri no será  candidato “porque no le dan los números”, como dejaron trascender desde el entorno de Alberto Fernández. Más que un acto de grandeza y un renunciamiento, la jugada de Macri es vista como un intento de preservación de un lugar de liderazgo por parte de alguien que, como candidato, supera el 70% de rechazo en la intención de voto.

“MACRI TIRÓ UN VIDEO AYER A LA MAÑANA Y NO HUBO UNO QUE SALIERA A DECIRLE QUE LO REPIENSE". 

Profundizando esa línea, en La Cámpora trazan un paralelismo con lo que fue el anuncio de CFK. Reforzando la idea de que “se baja porque no le dan las encuestas”, en la principal organización de kirchnerismo también leen que “Macri cree que tomando esa decisión se para en un lugar de jefe de la oposición y si te fijás los radicales, Morales salió a decir que es un tema del PRO, bajándole el precio”, y agregan “todos sus propios estaban esperando que se baje”. En ese punto marcan una asimetría con lo que generó el anuncio de CFK de que no será candidata: “fijate la diferencia, Cristina dijo ´no voy a ser candidata´ y nosotros estamos haciendo un acto en cada lugar pidiendo por ella, porque revea su decisión, denunciando la proscripción, y en el caso de Macri tiró un video ayer a la mañana y no hubo uno que saliera a decirle que lo repiense, al contrario, salieron todos en fila a decir gracias, gracias, gracias y se acabó la canción”.

OPERATIVO CLAMOR POR CFK

El anuncio de Macri termina de desterrar, si es posible una afirmación semejante en la política argentina, una posibilidad con la que muchos especulaban y hasta fantaseaban: ya no habrá una “batalla final” entre CFK y el ex presidente, que podría haber sido la máxima confrontación en las reglas de la democracia entre los dos mayores exponentes de las líneas políticas mayoritarias en el país. Esa variable, sin dudas, era un elemento central en el desarrollo de la estrategia de la Vicepresidenta.

YA NO HABRÁ “BATALLA FINAL” ENTRE CFK Y MACRI. 

Si Macri asumía la representación política de sus planteos en una candidatura al máximo cargo político del país, difícilmente CFK podría haber eludido la responsabilidad de encabezar esa confrontación democrática, más allá de cualquier discusión sobre el impacto de su condena y a sabiendas de que ese era, quizás, el mejor escenario electoral para el oficialismo. Si Macri es el peor candidato de JxC en las encuestas, CFK es todo lo contrario para el peronismo. No solo es quien más mide, sino que nadie genera ni de cerca la movilización y motivación de la tropa propia como ella, un elemento decisivo en cualquier campaña electoral.

Pero, más allá de esa lectura del escenario, en el cristinismo consideran “indistintas una cosa de la otra”, en relación a la renuncia de Macri y la situación de CFK. Consultada por este medio, una fuente camporista se refirió al avance del operativo clamor que, hoy por hoy, pareciera mantenerse intacto: “esto no modifica en nada el pedido de la gente para que Cristina revea la situación”.

Una importante fuente del PJ bonaerense consideró que el anuncio de Macri “no le cambia nada a nadie en el FdT, lo que están esperando es una definición de Cristina, que hace tiempo dijo que no va a ser y que probablemente va a designar a alguien”. Sin embargo, dejan abierta una posibilidad: “la definición que se está esperando es si ella va en la boleta como senadora para que esté su nombre, o incluso la jugada de volver a ser Vicepresidenta, hay varios cuadros que se manejan y ese es uno”.

Por su parte, en el entorno de Andrés Larroque prefirieron no expresarse en torno al anuncio de Macri, cómo impacta eso en el FdT, en el operativo clamor y en la definición tanto de Alberto Fernández como de CFK. La Patria es el Otro, el nuevo armado que conduce “el cuervo”, viene siendo el principal impulsor de una candidatura presidencial de CFK, consigna que llevaron en su bandera encabezando la marcha el pasado 24 de marzo. El silencio de uno de los voceros designados en esta cuestión marca que las estrategias se están reajustando ante un anuncio que era esperable pero quizás llegó antes de lo esperado.

LA INDEFINICIÓN DE ALBERTO

Dentro de los impactos en el peronismo del anuncio de Macri, uno de los principales fue una nueva ofensiva por parte del cristinismo para acelerar una definición del Presidente. “Macri se baja porque entiende que pierde y lo mismo debería entender Alberto” expresaron a Diagonales desde las entrañas del kirchnerismo. “Hoy la aventura personal de Alberto puede llevar al peronismo a una derrota y no debería pasar eso, debería rever su postura y bajarse” profundizaron.

“MACRI SE BAJA PORQUE ENTIENDE QUE PIERDE Y LO MISMO DEBERÍA ENTENDER ALBERTO”. 

“Alberto tiene que sostener que es candidato todo lo que pueda porque si no liquida su mandato antes de tiempo, aunque ya está bastante liquidado” analizan desde un importante municipio del PJ bonaerense. “Lo tiene que hacer, por lo que seguramente va a mantener su posición casi hasta el cierre de listas” agregan.

Haciéndose eco de esas opiniones que comenzaron a circular ayer, el Presidente dejó trascender su mirada desde la gira internacional que está encabezando y que culminará con una reunión bilateral con el Presidente estadounidense, Joe Biden. El primer mandatario piensa que la decisión de Macri “es un tema de ellos” y no considera que sea un ejemplo que deba replicarse en el FdT, mucho más después de que Máximo Kirchner habilitara la posibilidad de competir en unas PASO. El Presidente se quedó sólo con esa parte del mensaje camporista, haciendo oídos sordos a que, para el cristinismo, esas PASO sólo son posible con el fuera de la competencia.

KICILLOF Y MASSA

El Gobernador de Buenos aires y el Ministro de Economía tienen una especie de suerte atada entre sí. Hoy por hoy, Massa sobrevuela como la primera opción del cristinismo para encabezar la boleta en caso que CFK ratifique su decisión de no jugar. Kicillof necesita un candidato de peso al tope de la boleta que arrastre algo de votos, ya que la figura de Gobernador queda en el medio de la misma, debajo de las candidaturas nacionales, y resulta muy improbable pensar en un alto grado de corte de boleta que favorezca a la elección provincial sin un candidato que traccione desde lo nacional. Al mismo tiempo, en caso de decidirse a ser candidato, Massa necesita un candidato fuerte en la PBA, que le garantice una buena elección en el territorio del 37% del padrón electoral.

En el entorno del ministro evitaron responder sobre si el anuncio de Macri influía de alguna manera en su posible candidatura. Él y su equipo siguen enfocados en el único aspecto que saben que será determinante: mostrar resultados económicos. El viernes, en pleno 24 de marzo, la comunicación del ministro difundió números sobre la baja de la brecha cambiaria como resultado del canje de bonos. Ayer, una hora después del video de Macri, hicieron lo mismo, esta vez con datos del crecimiento de la actividad industrial.

En la misma sintonía, Kicillof sigue enfocado en lo suyo: recorrer la provincia mostrando gestión y dándole volumen de esa forma a la candidatura más sólida que tiene hoy por hoy el kirchnerismo. Una versión que comenzó a circular en las últimas semanas arriesgaba la posibilidad de que el Gobernador diera el salto a una candidatura presidencial, basándose en dos elementos. Por un lado, el riesgo antes descripto de ir por la reelección provincial sin un candidato potente en lo nacional. Por el otro, que si CFK es quien más mide en el FdT, Kicillof es quien más logra fidelizar esa intención de voto, con una transferencia lo suficientemente alta como para volverlo un candidato presidencial altamente competitivo, algo de lo que el kirchnerismo carece si se le cae la opción Massa.

En la mesa chica del Gobernador, sin embargo, siguen descartando esa posibilidad: “Nosotros seguimos trabajando para continuar en la Provincia, pero no por una cuestión de capricho o aventura personal, sino por la convicción de que es lo mejor para el espacio”. En ese sentido, el anuncio de ayer de Macri “no cambia nada”.

OPCIONES

Con todo aún por definirse, hay algunos anotados para agarrar la papa caliente que significa hoy por hoy una candidatura presidencial en el peronismo. El primero de ellos es el resiliente Daniel Scioli. El Embajador en Brasil ya lanzó su candidatura y es la opción del PJ no cristinista si Alberto Fernández se termina bajando. Al “pichichi” sí le cambió en algo su jugada el anuncio de Macri, ya que la principal estructura argumental de su candidatura pasaba por una especie de “yo les dije lo que iba a hacer y lo hizo” en relación al ex presidente. El revival de aquel famoso debate presidencial del 2015 ya no será posible, lo cual obligó al equipo de Scioli a ajustar la línea en un comunicado que vio la luz poco después que el video de Macri.

“Me preocupa que siga reivindicando algunos de los graves errores de su gestión” expresó Scioli, y profundizó “en este año, en el marco de la elección presidencial, debemos pensar con profundidad las ideas que marcarán el destino y el rumbo del país. En este sentido, debo advertir que las políticas que reivindica el ex presidente nos pueden llevar con otros actores a repetir los mismos errores que pusieron al país de rodillas, paralizando el desarrollo y el crecimiento”. La operación de sentido sería, con Macri afuera, sigo discutiendo con sus mismas ideas encarnadas en otros candidatos.

Una opción que quizás cobre algo de fuerza con el paso de las semanas es una PASO entre un representante del cristinismo y uno del ala albertista. Con Scioli anotado en ese segundo casillero, el primero lo llenan, hoy por hoy, un camporista puro y un gobernador.

Eduardo “Wado” de Pedro es la alternativa que viene construyendo el kirchnerismo, frente a la posibilidad de que a Massa lo derrote la inflación antes que cualquier candidato de JxC y que la definición en torno a Kicillof sea sostenerlo para retener la provincia. De Pedro viene dando movimientos en ese sentido, y la semana pasada, en un mismo movimiento, elogió al Gobernador bonaerense y disparó contra Scioli. “Axel está transformando la realidad de la provincia de Buenos Aires. Desde la gestión de Felipe Solá no veo una gestión tan comprometida con las necesidades de la gente” soltó en un acto en Lomas de Zamora junto a Kicillof, Insaurralde y Máximo Kirchner, que dejó una potente foto de unidad cristinista.

El gobernador que asoma la cabeza es Jorge “Coqui” Capitanich. Siempre sobrevolando una posible candidatura presidencial que nuca se le dio, el chaqueño es un hombre cercano a CFK y que puede representar al interior del país y a la Liga de Gobernadores en una elección que hasta ahora chorrea “ambacentrismo”. La amenaza para Capitanich es que no tiene una sucesión construida con seguridad en su provincia, y ya cuenta con la experiencia de que le disputaran su liderazgo cuando dejó la gobernación para ser Jefe de Gabinete de CFK. Cabe recordar que entre 2015 y 2019 “Coqui” fue intendente de Resistencia y hace cuatro años mantuvo una fuerte interna con Domingo Peppo, quien era entonces gobernador, para la definición de las candidaturas en la provincia del NEA.

La pregunta que surge entonces es, incluso con el aval de CFK, ¿se arriesgaría Capitanich a encabezar una elección nacional, probablemente perdida de antemano, poniendo a su vez en riesgo su poder en el Chaco? Algunos elementos permiten aventurar una respuesta afirmativa. El “Coqui” acaba de sacar un libro, “Argentina merece más”, que no solo tiene un título presidencialista sino que reedita la estrategia de CFK con su “Sinceramente” del 2019 y de Macri con su “Primer tiempo” en 2021. Este lunes, Capitanich presentará su libro en el Teatro Macheral de Moreno, en lo que puede leerse como un desembarco del chaqueño en el conurbano bonaerense, territorio madre de cualquier estrategia electoral para el peronismo.

En la mirada de un operador del PJ bonaerense, la lapicera sigue estando en manos de CFK. “Si quiere ser competitiva seguramente designará a Massa, pero si quiere morir con la de ella y reorganizarse para después irá con alguno de los candidatos propios como Wado o Capitanich”. En ese sentido, las figuras del ministro de Interior y el Gobernador chaqueño seguramente cobrarán vigor en las próximas semanas en la competencia interna kirchnerista.

Mientras tanto, lo único concreto para el FdT tras el anuncio de Macri es que todo seguirá girando en torno a las indefiniciones del Presidente y la Vice. Y que si la oposición se ordena con Macri en otro lugar de la cancha, cada semana perdida por el oficialismo en discusiones internas para llegar a la construcción de sus opciones electorales aumentará el riesgo de llegar mal parados al momento del cierre de listas.