El día después de la denuncia al exmandatario Alberto Fernández por violencia de género presentada por su expareja Fabiola Yáñez, el presidente Javier Milei rompió el silencio sobre el tema que sacude la escena política y, con un mensaje bien a tono libertario, condenó la “hipocresía progresista” y utilizó el escándalo para justificar el ajuste económico y el ataque a las políticas de género, a las que definió como una “estafa moral, fiscal y política”. De yapa, aseguró sufrir “constantes ataques y difamaciones” y lamentó haber sido tratado de “machista”.

En una extensa publicación que no tardó en sobrepasar el millón de visualizaciones, el jefe de Estado se refirió por primera vez a la denuncia realizada contra Alberto Fernández este martes. Sin aclarar su postura ni mucho menos solidarizarse con la exprimera dama, el líder de La Libertad Avanza optó por ofrecer un mensaje adaptado al ideario de su Gobierno, que tiene en buena estima el recorte del gasto y el corrimiento del Estado, celebra la “mano dura” de la Justicia y arremete contra cualquier iniciativa tendiente a la igualdad de género; premisas a las que sumó una buena cuota de protagonismo personal.

En ese sentido, sus declaraciones fueron tajantes. Bajo el título de “La hipocresía progresista”, Milei alegó sufrir “constantes ataques y difamaciones” en su contra y remarcó que, pese a ello, siempre ha tenido “el coraje de decir la verdad sin importar las consecuencias”. Tras ello, arremetió contra “esa estafa que titularon ‘políticas de género’, una estafa de la cual se beneficiaron unos pocos, pero que financiaron todos los argentinos”; y, a continuación, explicó sus argumentos para limitar el gasto público en propuestas de género y desfinanciar cualquier iniciativa del área.

X de Javier Milei

Así, señaló: “La solución para la violencia que ejercen los psicópatas contra las mujeres no es crear un ministerio de la Mujer, no es contratar miles de empleados públicos innecesarios, no son los cursos de género y definitivamente tampoco es adjudicarle a todos los hombres una responsabilidad solo por el hecho de ser hombres. Décadas de estudios científicos son prueba de ello. La única solución para bajar el delito es ser duros contra quienes los cometen. Aumentar la burocracia estatal es una estafa moral, fiscal y política, es aprovecharse de un problema grave para hacer negocios”.

“Siempre sostuvimos lo mismo y, como fuimos los únicos en denunciar esta estafa, todos ellos nos acusaron, sin ninguna prueba, de ser machistas, violentos y misóginos. Es decir, utilizaron esta problemática no solo para hacer negocios, sino también para hacer política. Las causas nobles en las que se embanderan como la igualdad de género son una excusa para justificar sus negocios, porque cuando vamos a los hechos, los de ellos siempre son buenos y los nuestros siempre son monstruos”, comentó el presidente más adelante.

Y consideró: “Ellos pueden golpear, maltratar, violentar, robar y cualquier otra atrocidad pintados de verde y mostrándose como aliados; mientras que nosotros, que valoramos a cada individuo como un fin en sí mismo, somos los que venimos a cortar derechos, somos los violentos, etcétera. El camino al infierno está pavimentado de buenas intenciones”. Cabe destacar que, más temprano, el Gobierno Nacional informó que se encontraba a disposición de la Justicia para colaborar en la investigación tras la denuncia de Fabiola Yáñez.