El pasado martes finalizó del contrato de concesión de la empresa Caminos del Río Uruguay S.A. (CRUSA), que operaba las rutas 12, 14 y el Puente Rosario-Victoria, y la incertidumbre sobre su continuidad laboral crece entre los trabajadores del peaje. El control de esas trazas fue asumido por Vialidad Nacional, pero según denuncian desde el Sindicato Único de Trabajadores de Peajes y Afines (SUTPA) en ese proceso no se incorporó a los empleados que prestaban servicios en esos peajes. 

Ante esta situación, los trabajadores del peaje llevan adelante una protesta sobre la Autopista Riccheri, a la altura de Mercado Central.

Por u parte, el gremio advierte sobre el peligro de despidos masivos y exigen al al Gobierno estabilidad laboral, además de la conservación de sus puestos ante la posibilidad de que se pierdan 500 fuentes laborales. 

La medida de fuerza incluye la reducción de dos carrilles y el levamiento de barreras en el peaje, es decir que no cobran ninguna tarifa a los vehículos que pasan por allí.

La manifestación comenzó a las 6 de la mañana de este viernes y genera largas demoras en el tránsito hacia la Ciudad de Buenos Aires.

“El objetivo es visibilizar el conflicto sin perjudicar a los usuarios con cortes de tránsito. Nuestra lucha no es sólo por nosotros sino también por los 500 trabajadores de la empresa Caminos del Río Uruguay que han sido abandonados a su suerte por todos los Organismos del Estado que tienen responsabilidad sobre las rutas nacionales”, indicaron desde SUTPA.