La excusa fue el “ciclo de formación política: hacia un proyecto de liberación nacional”; la sede, Avellaneda, casa del jefe comunal que se saca chispazos con los alfiles más aguerridos de La Cámpora en la Provincia; el mensaje, claro: quebrarle la muñeca a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (CFK) y mostrarle oposición “axelista” en plena carrera electoral del Partido Justicialista (PJ). Y los protagonistas dan que hablar: el intendente local Jorge Ferraresi y el gobernador riojano Ricardo Quintela.

“Los últimos procesos de unidad fueron sometimiento”, disparó ayer por la tarde el alcalde de Avellaneda desde el Centro Cultural Mercado, local que reunió a cientos de militantes para hacerle la “opo” al “operativo clamor” del kirchnerismo a semanas del recambio de autoridades en el Justicialismo. “Nos merecemos un debate interno”, aseveró después, en un comentario que fue recogido también por Quintela, quien a su turno alentó: “Tenemos que debatir varias cosas a nivel nacional”

El mandatario provincial tuvo su plato fuerte en la gira bonaerense con la visita a Ferraresi en una de las zonas más fuertes del “axelismo”. El cónclave cerró con un pedido sintetizado por el propio intendente en redes sociales luego: “Construir desde acá una alternativa”. La “alternativa” en cuestión es, ni más ni menos, una opción distinta a la conducción de CFK, quien se lanzó de lleno a la campaña por la Presidencia del PJ, profundizada hoy con críticas al veto al presupuesto universitario.

X de Jorge Ferraresi

En ese marco, el intendente resumió claramente la postura del sector que, en principio, se enfrentará a la exmandataria en las urnas del partido. “Un Estado presente es lo que hacemos en Avellaneda, lo que hace Ricardo Quintela en La Rioja y lo que hace Axel Kicillof en la Provincia de Buenos Aires. Vamos a construir desde acá una alternativa”. El eje está claro, y la foto comprueba también el caudal de militancia disponible para el desafío. Sin embargo, La Cámpora pisa fuerte en la carrera electoral.

El mensaje difundido por Ferraresi ayer luego del cónclave resulta evidente. “Reflexionamos sobre el debate interno que se necesita y sobre la construcción de una herramienta política para recuperar el Gobierno. Tenemos que ser capaces de generar transformaciones y tener la decisión y vocación de llevarlas a cabo. Como peronismo, debemos volver a construir mayorías y unidad con un objetivo claro: mejorarle la vida a nuestra comunidad con un Estado presente”. Un gesto potente en una interna que arde.