En su alocada carrera por convertirse en un líder de la ultraderecha mundial, Javier Milei viene comprometiendo a la Argentina y su política exterior con sus actitudes extremistas. A los conflictos China o Brasil, por citar los mayores ejemplos, se suma una nueva alarma tras lo que fue la participación de Milei en la Cumbre Global de la Paz organizada por Volodimir Zelenski en Suiza.

“Quiero expresar, en nombre del pueblo argentino, nuestro máximo apoyo al pueblo de Ucrania, y a nuestro amigo Volodomir Zelenski, ya que como defensores de la idea de la libertad repudiamos cualquier forma de violencia, ya sea entre individuos, pero en particular repudiamos la guerra como mecanismo ilegítimo para dirimir los conflictos entre naciones”, expresó el presidente argentino luego de ser recibido por su par ucraniano en Zurich.

Las declaraciones y el gesto político de Milei no cayeron nada bien en Moscú, como era de esperarse. Lo preocupante es que la reacción rusa excedió el mero descontento, y dejó unas preocupantes declaraciones de su embajador en el país, Dmitry Feoktistov, que abren la pregunta sobre cuán costosas pueden terminar resultándole a la Argentina los stand up internacionales de Milei.

“En abril, Argentina solicitó el estatus de socio global de la Alianza. Francamente, no comprendemos cómo otorgar este estatus puede mejorar la seguridad de Argentina”, señaló el embajador ruso en relación al fuerte alineamiento de Argentina con Ucrania y la intención de formar parte de la OTAN. Feoktistov afirmó que en Moscú están “preocupados” y “decepcionados” con los movimientos del Gobierno argentino en esta materia.

Tratando de poner paños fríos, el embajador ruso apostó a que el país se sostenga en su tradición histórica de neutralidad, remarcando que así “contribuirá a preservar la naturaleza amistosa de las relaciones ruso-argentinas, que históricamente han sido inmunes a tendencias políticas”.

Pero desde Moscú la respuesta no se quedó en esa mera expresión de deseo, y pasó al plano de la advertencia. En relación a un posible envío de armas y tanques por parte del país, a través de Alemania, una posibilidad que se viene mencionando hace tiempo, Feoktistov dijo que “las informaciones periodísticas sobre el posible envío de tanques argentinos a través de Alemania, similar al acuerdo de los aviones con Francia, también son preocupantes. Hemos comunicado claramente y con firmeza a Argentina que tales acciones serán consideradas un acto hostil contra Rusia”. Las sobreactuaciones del Milei y del Gobierno nacional terminan acercando así al país un conflicto que queda a miles de kilómetros de distancia.