“El desfile del Terror”, así definió Ernesto Alonso al desfile militar por el 9 de Julio que organizó Casa Rosada. El ex combatiente de Malvinas denunció que al menos tres acusados de torturar a soldados durante la guerra en las Islas participaron del evento que encabezó el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel. 

Alonso fue soldado conscripto durante la guerra de Malvinas y, en la actualidad es secretario de Derechos Humanos del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas (CECIM) - La Plata. Tras el desfile militar por el Día de la Independencia, compartió una foto en sus redes sociales donde se puede identificar “a varios torturadores de Soldados del Regimiento 5”. 

“En esa unidad hubo muertes por hambre y soldados muertos bajo fuego enemigo estando estaqueados y casos de enterramientos como castigo”, detalló el ex combatiente.

En concreto, los señalados por el dirigente del CECIM son Emilio José Samyn Ducó, Francisco Eduardo Gassino y Jorge Taranto, los tres identificados por ex combatientes como responsables de crímenes de lesa humanidad durante la guerra de 1982.

En total son 26 los mandos militares imputados por aplicar tormentos a soldados argentinos durante el conflicto bélico en las Islas, en una causa que todavía está abierta y espera una resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. 

Samyn Ducó, Gassino y Taranto están imputados en esa causa. Sin embargo, el pasado martes desfilaron como héroes de Malvinas frente el horror de varios ex combatientes que fueron sus víctimas. 

Ex combatientes denunciaron que el desfile militar de Milei incluyó a torturadores de soldados

Gassino fue subteniente y jefe de la Sección Comunicación de la Compañía de Comando de Regimiento de Infantería 5 (RI5) durante la guerra de Malvinas. En la causa iniciada por el fiscal federal de Río Grande en Tierra del Fuego, Marcelo Rapoport, el jefe militar está acusado por “imposición de tormentos” contra los soldados Jorge Ramón Diez, Carlos Raimundo Rodas,  Elvio Emilio Nis, Antonio Horacio Gallardo, Román Orlando Solís, Carlos Argentino Pereyra y Oscar Orlando Frías.

Taranto también era subteniente y se desempeñaba como el Jefe de la Sección de Apoyo de la Compañía B del RI5. En su caso, ex conscriptos denunciaron que el jefe militar los había hambreado, golpeado, estaqueado y torturado de diversas maneras como meter su cabeza en agua helada o disparado en los pies para “hacerlos bailar”.  

Por su parte, Samyn Ducó era subteniente a cargo de la Primera Sección de Tiradores de la Compañía C del RI5, y fue acusado de múltiples y crueles torturas. 

Uno de los hechos más terribles que se detalla en la causa fue el estaqueo del soldado José Alberto Yanevich, ordenado por el propio Samyn Ducó. “El estaqueamiento duró dos días durante los cuales como secuelas padeció no sólo el congelamiento y pie de trinchera sino que además la deflagración de una bomba durante un bombardeo, mientras permanecía estaqueado, le ocasionó ceguera absoluta, que aún padece", relata el expediente.

X de Ernesto Alonso

La Justicia de primera instancia y la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia consideraron que estas torturas aplicadas contra soldados argentinos durante la guerra de Malvinas eran delitos de lesa humanidad y, por consiguiente, no podían prescribir.

Sin embargo, la Cámara Federal de Casación Penal revirtió ese criterio y cerró la causa, pero en 2021 la decisión fue apelada por el CECIM, la Comisión por la Memoria de la Provincia de Buenos Aires, la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires y la Fiscalía General ante la Cámara Federal de Casación Penal.

Desde entonces, la causa contra mandos militares por torturar a ex combatientes espera una resolución de la Corte Suprema.