La obra arquitectónica de Milei para meter a Sturzenegger sin pelearse con Caputo

Parecía toda felicidad y alegría después de que el Gobierno consiguiera la tan anhelada Ley Bases en el Senado, pero a ese triunfalismo que parecía que dejaba de lado todas las internas en el oficialismo le siguen nuevos capítulos de resquemores en La Libertad Avanza. Y con ellos, ciertos reacomodamientos y ratificaciones.

Tras la conmemoración por el Día de la Bandera, el presidente Javier Milei, y sobre todo el equipo que responde al jefe de Gabinete Guillermo Francos, buscan apaciguar la tensión interna en las principales áreas de la gestión, mientras el mandatario emprende su nueva cruzada europea, buscando galardones individuales y lejos de la agenda de Estado.

Es por eso que Milei volvió a sacarse una foto con la canciller Diana Mondino ayer en Rosario, en un intento por despejar las sospechas del corrimiento de la economista de la UCEMA. Mondino había sacado de su perfil de Twitter X la leyenda del cargo que aún mantiene, en medio de los rumores por la llegada del actual titular del área de Turismo, Ambiente y Deportes, Daniel Scioli.

A pesar de las reiteradas desautorizaciones que tuvo Mondino en el último tiempo, como ocurrió luego del episodio en que el Presidente se enojó por la presencia del embajador de Palestina en una reunión con representantes diplomáticos de Medio Oriente, pareciera que la ex diputada respira.  

Otro round entre el Presidente y su vice está en puertas. El protagonismo estelar de Villarruel para desempatar la aprobación de la Ley Bases en el Senado repercutió en la relación tumultuosa entre los socios del binomio del Poder Ejecutivo.

Su discurso, trabajosamente preparado, y al que esperaba con ansias, la posicionó en el centro de la escena. Desde su entorno afirman que "cumplió con lo que tenía que hacer", sin mucha expectativa de que la relación Milei- Villarruel mejore.

Sobre todo, la tensión sigue latente entre la abogada que organizaba visitas a la cárcel donde se alojaba Jorge Rafael Videla y la hermana, alter ego de Milei y secretaria General de la Presidencia, Karina Milei.

Los trascendidos indican que Villarruel pidió disculpas por algunas de sus declaraciones sobre la figura del Presidente durante la única entrevista televisiva que dio luego del fuerte cortocircuito en el binomio presidencial, luego que la titular del Senado habilitara el tratamiento del mega DNU 70/ 2023, en la que llamó “jamoncito” al mandatario.

Por lo pronto, Villarruel sigue su gira "patriótica" por las provincias. Antes de recalar ayer en el Monumento a la Bandera en Rosario, estuvo en Salta, durante el homenaje al general Güemes, con el gobernador Gustavo Sáenz.

El mandatario aliado a Sergio Massa pidió más obras para la provincia y esto le significó el desplante de varios miembros del elenco nacional. Pero Villarruel se mantuvo inconmovible, mostrando su performance institucional.

Acepta gustosa las invitaciones de los gobernadores, mientras Milei se dedica a salir al extranjero una y otra vez. Las especulaciones indican que por eso el jefe de Estado definió quedarse unas horas más en el país, antes de su arribo nuevamente a España.

Desde el equipo de la Vicepresidenta deslizan que se viene un mayor ruedo en entrevistas y notas por parte de Villarruel para sacar a relucir su impronta como una de las figuras del Gobierno, en busca de mayor acumulación política.

EL GABINETE BUSCA DESACTIVAR LA INTERNA HISTÓRICA ENTRE CAPUTO Y STURZENEGGER

Por estas horas, hay un tema que mantiene al Poder Ejecutivo en vilo y es cómo integrar al asesor y pieza clave de Milei en su plan desregulador, a Federico Sturzenegger, sin que explote por los aires la relación con el elogiado hasta el hartazgo como el “mejor ministro de Economía de la historia Luis “Toto” Caputo.

En esa interna, que viene de arrastre desde la época en que integraban el equipo económico de la administración de Mauricio Macri, se dividen dos bandos dentro de los bloques de poder que pugnan por mayor protagonismo y preferencia: las energéticas vs. Las entidades financieras.

Desde el Gobierno afirman que “no importa tanto el cargo, sino en qué área va a poder intervenir para su plan desregulador. Los límites de los alcances de otras carteras, como la de Gabinete que encabeza Francos, y, especialmente, la de Economía que comanda Caputo, será un tópico principal para luego dar a conocer qué posición tendrá Sturzenegger.

Milei le había prometido que tendría un “superministerio”, pero en el entorno de Francos le recomendaron bajar el tono de esas pretensiones para descomprimir las tensiones con el ministerio de Economía.

Entre los objetivos del pope desregulador, una vez que esté en funciones figura la supresión o desmantelamiento de áreas como la Industria, la Minería, el SENASA y el INTI, entre otros sectores. En este esquema Economía quedaría limitado al manejo de Hacienda y Finanzas y el BCRA, la política fiscal, monetaria e inflacionaria.

Caputo quedó de lado cuando Milei llevó en su comitiva a uno de los referentes de Sturzenegger en su viaje al G7: el jefe del equipo de sus asesores Demian Reidel. “Toto” además fue el único ministro que no estuvo presente ayer en el homenaje por el Día de la Bandera en Rosario.

Se espera que a la vuelta de su nueva gira europea, Milei reciba a Sturzenegger, en un encuentro que será de alto voltaje por las negociaciones internas que implican y la consecuente reformulación del Gabinete.

No pudo hacerse esta reunión antes del viaje del mandatario, por una indisposición de Milei. Se había descompuesto por comer medialunas.