Sea todo dicho, la “fase dos” del programa de Economía comenzó renga – esto es, solo con el pie izquierdo. El anuncio del Gobierno en aquel viernes gris provocó un alud de luces rojas de parte de los mercados, con el más destacado en la suba récord que llevó al dólar blue a un nuevo máximo histórico, y la crisis no ha acabado todavía. Mas con la expectativa de calmar las aguas en un mar delicado entre dudas y reclamos, la administración libertaria avanzó este martes con la flexibilización del cepo cambiario, aunque elude aún su eliminación.

El tiempo dirá si el paso dado esta noche por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) fue con el pie izquierdo o con el derecho; pero, más allá de su recepción, lo cierto es que la suavización de las restricciones para que la población pueda acceder a obtener dólares fue una de las principales promesas de campaña de un Gobierno de Javier Milei que, sin embargo, continúa esquivando las preguntas acerca de cuándo llegará el levantamiento definitivo del cepo.

Hasta el momento, lo único que se sabe es que desde este martes “las personas humanas que habían recibido alguna ayuda del Estado durante la pandemia o que tienen un subsidio en los servicios públicos” podrán comprar dólares MEP y CCL (Contados Con Liquidación), de acuerdo con la disposición autorizada esta tarde por la institución que dirige Santiago Bausili, en alianza con el plan económico del ministro y amigo suyo Luis “Toto” Caputo. La iniciativa fue celebrada hoy como un movimiento hacia la “liberalización del mercado cambiario”.

X de BCRA

“Con esta medida, quedarán habilitados para suscribir créditos hipotecarios en pesos y acceder al dólar MEP para concretar sus operaciones inmobiliarias todas aquellas personas que estaban incluidas” en la categoría previamente mencionada, restringida desde tiempos de la pandemia para la compra de dólares. El proyecto fue acompañado por otros dos dictámenes de carácter similar: la “flexibilización en los plazos de pago de importaciones”, primero; y el “aumento del monto no obligado a liquidar por exportación de servicios”, luego.

De este modo continúa su rumbo la “fase dos” del plan económico. Su meta, adelantó el Gobierno en el informe difundido junto al anuncio del BCRA, es “remover y flexibilizar las regulaciones de acceso al mercado de cambios” y eventualmente lograr “la eliminación total de las restricciones, como objetivo final”. No obstante, todo parece indicar que para ello falta mucho todavía: como suelen reiterarlo las principales figuras de la gestión libertaria, el levantamiento del cepo se encuentra del otro lado del horizonte.