En su informe de Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, por sus siglas en inglés), el Fondo Monetario Internacional empeoró las proyecciones para la economía argentina con una caída del Producto Bruto Interno mayor a la que habían anticipado en abril. 

Hace poco más de tres meses, el organismo multilateral había estimado que el retrocedo de la actividad económica en el país sería de 2,8%. Sin embargo, en el último informe actualizó sus pronósticos y aseguró que el descenso será del 3,5%. 

Esta cifra representa una pérdida de 0,7 puntos porcentuales en relación a las proyecciones anteriores y de 1,9 puntos respecto del año pasado. Cabe recordar que según los datos del Fondo, el PBI retrocedió 1,6% en 2023. 

Atento a ello, el FMI había anticipado que la recesión se profundizaría este año. Sin embargo, ahora las proyecciones son peores. 

Por otro lado, el organismo advirtió sobre la inflación a nivel mundial y señaló que  "la aceleración de los precios de los servicios está frenando los avances en materia de desinflación, lo que está complicando la política monetaria”.

“Por lo tanto, los riesgos al alza para la inflación aumentaron, incrementando así la perspectiva de tasas de interés más altas durante un período aún más largo en un contexto de crecientes tensiones comerciales y mayor incertidumbre política", añadieron.

Frente a ello recomendaron “gestionar estos riesgos y preservar el crecimiento” a partir de "la combinación de políticas debe secuenciarse cuidadosamente para lograr la estabilidad de precios y reponer las reservas disminuidas”.